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OBRA DE TEATRO EL ICARO



EL ICARO
por jhossue, sep 25 2006

Descripción de personajes:
Josefina: Joven engreída, de gestos muy felinos, aletargados, bruscos y suaves, con doble personalidad. Viste ropa de playa, bien maquillada y con lentes oscuros en la cabeza, zapatillas altas.
Bernarda: Otra joven engreída pero sifrina, dulce y juguetona, sin maquillajes, con zapatillas y traje de playa vistoso.
Alejandra: Una joven resaltante, inteligente, de temperamento fuerte, viste camisón largo, lleno de lentejuelas, cinturón ancho, bolsito de turquí a espaldas, un sombrero de playa y zapatillas al-tas. Va bien maquillada.
Loquero 1- Hombre brusco vestido con uniforme de enfermería
Loquero 2- Hombre brusco vestido con uniforme de enfermería

El fondo una casa antigua. Está ubicada entre un frondoso sotobosque, en su parte posterior una laguna de destello azul donde el sol hace su indumentaria. Al lateral izquierdo existe una zona herbácea que se difumina con una vegetación halófila.
De la casa antigua sale Josefina, un personaje de mediana estatura, algo tosca y díscola. Detrás le siguen Bernarda y Alejandra.

I ESCENA
JOSEFINA: (levanta sus dos manos en posición de plegaria y exclama algo sonsa y como desquiciada)- ¡Voy a volar!
(Se arrodilla en la humedad del suelo humífero y grita misteriosa)
Soy el ICARO que no necesita alas para volar
(Se levanta como ida del juicio. Los ojos puestos en un punto indefinido y dulcificando su expresión corporal dice embelesada)
Pero hoy no es el día para volar, volare mañana.
ALEJANDRA: Estas tostada de la sesera.
(La mira de reojo y exclama admirada)
Quizás necesites un Psiquiatra, está enfermo de la mente. ¿Qué dices tú Bernarda? (Bernarda asienta la Cabeza)
Mira Josefina en algunas ocasiones tenemos que ser discretos. (Se dirige a Bernarda mientras gira los dedos alrededor del oído), podemos pasar por locos.
BERNARDA: esto es inconcebible, no es de esperarse lo mejor.
(Se ríe entre dientes) la veo como algo fuera de si, a lo mejor necesita tratamientos.
(Da un paso y le da una patada a un pedrusco que se lo-caliza entre las hierbas). Pero quizás lo que está haciendo es puro teatro, Josefina es un actriz desde que estudio teatro en Teresa Carreño, ella se cree Fankin virgen.
ALEJANDRA           : (Enfática e irrisoria corrige la pronunciación de Bernarda)
-¡Que pendeja! no es fankin Virgen, es Franklin Virguez.
(Bernarda hace un ademán de aburrimiento) vamos, es hora de llegar a la parada, recuerden que hoy vamos para Santa Cruz, y a Josefina que se deje de sus loqueras e interpretaciones confusas.
(Todos salen del escenario)

II ESCENA
El fondo un hermoso panorama, un río de aguas cristalinas, a sus orillas crecen frondosos bambúes y árboles del Anauco. Alejandra abre sus brazos, una brisa suave acaricia su aterciopelada tez blanquecina y su pelo se alborota enloquecidamente, ella cierra los ojos y mientras sueña despierta, exclama inspirada.
JOSEFINA: hoy es un día bello para fenecer fulminada por los rayos del sol, el es mi amado, yo soy su amada, el es el principio, yo soy el final. (Coloca las manos en posición de oración, inclina su rostro y dulcificado su aliento exclama algo dolosa)
-           ¡Quiero Volar! ¡Quiero Volar! ¡Quiero volar! (abre sus brazos y grita como en trance)
-           Amado mío dadme tus alas de Cera.
-           Amado mío extiéndeme tu furia, quiero renacer de las cenizas como el ave fénix.
BERNARDA: (la mira extrañada, frunce el ceño, hala de súbito ha Alejandra y le susurra al oído)
-           ¿Qué le pasa? (hace círculos con el dedo alrededor de la oreja y dice misteriosa)
-           Me parece que está loca de perinola.
ALEJANDRA: (se aleja rápidamente y echándose aire con la mano y frunciendo la nariz le dice)
-           Foo Bernarda tienes un mal aliento que apesta a “diastres”.
BERNARDA: (se sonroja y mirando a todos lados apenada le dice en forma airada)
-           Será a tu abuela que le huele la boca a piel de “burra zarataca”
(En ese momento se vuelve a oír la voz de Josefina con más contundencia)
JOSEFINA: Quiero volar, estoy enamorada del sol y sus cabelleras de luz, de sus ojos azules de cielo y sus brazos de cundeamor de noche, quiero hundirme en su piel ígnea, que me acaricie con sus labios de lava ardiente y me haga sentir a plenitud la pasión estacionaria por abrasión solar.
ALEJANDRA: ¡Dios mío se ha vuelto totalmente estúpido! Con razón dicen que su abuelo Venancio Hernández se volvió en su vida senil, un loco de remate, tenía una rara manía que realizaba delante de quien fuese.
BERNARDA carambolas, ¿Qué hacía? Y perdona mi mala curiosidad.
ALEJANDRA: Se lo metía, hurgaba y luego se lo olía.
BERNARDA: (Se ríe con estrépito y exclama despectiva) ¿que el dedo en su rabo?
ALEJANDRA: (La mira con desprecio) En el tuyo mal pensada, diablos sí que eres bromista y pesada. Además no era en su rabo…
BERNARDA: (Le corta bruscamente la conversación) en el tuyo (se ríe)
ALEJANDRA: (La empuja suavemente y despectiva) Ya… ya… yaaaaa…
BERNARDA: ¡Entonces que!
ALEJANDRA: En su olfato pendeja.
BERNARDA: ¡En el tuyo!
ALEJANDRA: Otra vez con eso, ya te daré lo tuyo, te voy hacer volar hacia el sol como quiere Josefina. (La persigue alrededor de Josefina tratando de capturarla. Josefina da unos taconcitos en el suelo, se coloca las manos en la cintura en forma desafiante y grita enojada, mientras las muchachas efectúan su bochinche.)
JOSEFINA: ¡Basta de tonterías! (las jóvenes tropiezan con Josefina y caen al suelo) (Alejandra se golpea en la cabeza y queda atontada, se levanta dando traspiés mientras dice enloquecida)
ALEJANDRA: AY ESTOY VOLANDO, AY, AY ESTOY VO-LANDO. Abre los brazos como tratando de encontrar alivio a su desesperación, en esos entra dos loqueros con una camisa de fuerza.
LOQUERO 1. ¡Mira! es la loca que andamos buscando, la que dicen en el pueblo que quiere volar. ¡Atrápala que es peligrosa!
LOQUERO 2. Hay que llevarla al manicomio, ¡vamos! (Sin avisar agarran a Alejandra, ella forcejea contra los dos hombres que le colocan la camisa de fuerza. Josefina se asusta y se va en desbandada. Bernarda atemorizada pierde el habla y observa entumecida y paralizada como se llevan a su amiga. Cuando ve que todo está solitario, comienza a danzar y a bailar en forma frenética y mientras se retira del escenario va cantando esta canción.
BERNARDA: QUIERO VOLAR… QUIERO VOLAR… QUIE-RO VOLAR… QUIERO VOLAR… QUIERO VOLAR… (y se ríe locamente)
FIN
Autor: Eliad Jhosué Villarroel
Imagen de: yanes.wordpress.com

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